sábado, 18 de agosto de 2012
¿Por qué titilan las estrellas?
¿Ha apreciado usted alguna vez cómo parece temblar una moneda arrojada al fondo de una piscina? Esto sucede porque el agua tuerce el recorrido de la luz que refleja la moneda.
De forma semejante, las estrellas titilan porque la luz que emiten tiene que atravesar varios kilómetros de atmósfera terrestre antes de llegar al ojo que la observa. Es como si miráramos el universo desde el fondo de una piscina. La atmósfera de la Tierra es turbulenta: en ella se forman, agitan y dispersan sin cesar corrientes y remolinos. Estas perturbaciones actúan como lentes y prismas que desplazan la luz de las estrellas de manera minúscula de un lado a otro varias veces por segundo.
Con objetos grandes como la Luna, estas desviaciones se promedian. (No obstante, al usar telescopios con muchos aumentos, también estos parecen temblar). Las estrellas, en cambio, se encuentran tan lejos que en realidad funcionan como fuentes puntuales, y la luz que vemos parpadea a medida que los rayos incidentes se tuercen deprisa de un lado a otro.
Planetas como Marte, Venus y Júpiter, que se nos muestran como estrellas brillantes, están mucho más cerca y al telescopio se ven como discos medibles. También aquí se promedia el temblor de las regiones periféricas del disco y se percibe una variación muy ligera en el conjunto de la luz que emana del planeta.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario