Vista desde el espacio, la Tierra aparece como una bola azul. No es de extrañar, puesto que mares y océanos representan casi el 70% de la superficie del globo terrestre. Evidentemente, estas grandes extensiones cubiertas de agua salada responden a definiciones precisas. Los océanos separan los continentes; hay cinco: Atlántico, Pacífico, Índico, Ártico y Antártico. Por su parte, los mares son

Pero el elemento más característico para distinguir el mar del océano está en el fondo del agua. Para entenderlo, debemos imaginarnos el hueco del océano. Los científicos distinguen varias zonas del fondo marino, según su profundidad: primero la plataforma litoral o continental. Después el talud continental, que empieza a unos 2.000 metros y que, junto con la plataforma continental, forma parte de lo que algunos definen como precontinente.

Simplificando, una placa oceánica formada por roca funde, se enfría, se extiende y después se hunde

Entonces, además de las distinciones hechas antes, lo que determina la distinción entre mar y océano es la extensión y profundidad de las fosas abisales. Los océanos se caracterizan por la menor extensión de su plataforma continental y la existencia de fosas abisales en su suelo, mientras que los mares nunca tienen fosas abisales y su fondo marino se reduce a veces a la plataforma y talud continental.
No hay comentarios:
Publicar un comentario