viernes, 3 de mayo de 2013
¿A qué huele el espacio?
La última frontera huele de forma similar a una carrera de coches, es decir, a una combinación entre metal caliente, humo de diesel y barbacoa. ¿Cuál es la causa? Las estrellas moribundas.
El subproducto de esta combustión está formado por compuestos olorosos denominados hidrocarburos policíclicos aromáticos. Estas moléculas parecen encontrarse por todo el universo y flotan por el espacio eternamente, apareciendo en cometas, meteoritos y polvo espacial. Se cree que estos hidrocarburos fueron la base de las primeras formas de vida en la Tierra. No es de extrañar que dichos hidrocarburos se encuentren en el carbón, el aceite e incluso algunos alimentos.
Pese que resulta imposible para los humanos oler el espacio exterior, podemos obtener una fuente indirecta de su olor. Cuando los astronautas se encuentran fuera de la Estación Espacial Internacional, los compuestos del exterior se adhieren a los trajes y entran en la estación cuando regresan. Los astronautas han explicado que los trajes huelen a chuleta “quemada” o “frita” o incluso a pólvora recién utilizada.
Nuestro sistema solar tiene un olor acre en parte debido a que es rico en carbón y bajo en oxígeno y al igual que un coche, si uno no lo abastece de oxígeno, crea hollín y huele mal. Sn embargo, las estrellas ricas en oxígeno tienen aromas que recuerdan a una parrilla. Fuera de nuestra galaxia, los olores son más interesantes. En oscuras zonas del universo, las nubes moleculares llenas de pequeñas partículas de polvo podrían contener múltiples aromas, desde el olor a azúcar hasta el repugnante olor a huevo podrido del azufre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario