domingo, 17 de octubre de 2010

¿Por qué la cafeína nos mantiene despiertos?


Básicamente, el café que bebes por la mañana cambia la química de tu cerebro, bloqueando la acción de la sustancia natural asociada con el sueño.

La adenosina, un nucleósido sintetizado naturalmente por el organismo, cumple una importante función en procesos neuronales, especialmente en el ciclo sueño-vigilia. La adenosina se "pega" a receptores específicos del cerebro, causando somnolencia y ralentizando la actividad de las células nerviosas. También hace que los vasos sanguíneos se dilaten (se cree que para facilitar el aporte de oxígeno durante el sueño). La adenosina se va produciendo en nuestra actividad diaria, como una especie de subproducto del ejercicio.

Pues bien, para una célula nerviosa, la cafeína tiene el mismo "aspecto" que la adenosina. La cafeína se adhiere a los receptores de adenosina, pero a diferencia de ésta no ralentiza la actividad celular. Además, las células ya no pueden “sentir” la adenosina, porque los receptores en los que ésta debería "aparcar" ya están ocupados por la cafeína. Así que en lugar de "adormecerse", las células nerviosas se aceleran. La cafeína también provoca una contracción de los vasos sanguíneos -puesto que bloquea la capacidad de la adenosina para abrirlos-, así que si se tiene un dolor de cabeza por causas vasculares, la cafeína ayudará a aliviarlo.

Con la cafeína bloqueando a la adenosina, las neuronas no disponen de ese "freno" natural y comienzan a funcionar a toda velocidad. La glándula pituitaria ve toda esa actividad y piensa que debe estar sucediendo algún tipo de emergencia, por lo que libera hormonas que le dicen a las glándulas correspondientes que liberen adrenalina (epinefrina). El resultado final es que:

- Las pupilas se dilatan

- Las vías respiratorias se abren (por eso la gente que sufre de asma severo se inyecta a veces epinefrina).

- El corazón late más deprisa

- Los vasos sanguíneos superficiales se contraen para ralentizar el flujo sanguíneo y atenuar las consecuencias de una posible herida. También se incrementa el flujo sanguíneo hacia los músculos. La tensión aumenta.

- El hígado libera azúcar en el torrente sanguíneo como aporte extra de energía.

- Los músculos se contraen, preparados para la acción.

Y esto explica por qué cuando uno se toma una buena taza de café cargado, las manos se enfrían, los músculos se tensionan, el corazón se acelera y uno se siente más enérgico y dispuesto para la acción.

No hay comentarios:

Publicar un comentario